Conserje travieso es despedido por un comportamiento inapropiado en el lugar de trabajo

Una conserje traviesa, conocida por sus travesuras kinky en el trabajo, pierde su trabajo. Desempleada, anhela sexo. Una amiga cumple sus deseos con guantes, lo que lleva a un salvaje y asistido con guante anal.

Este cuento tentador gira en torno a una pícara limpiadora que no puede resistir el atractivo de la fruta prohibida.Vestida con su uniforme inmaculado, completo con guantes, se supone que está frotando cualquier rastro de lujuria del baño de la oficina.Sin embargo, sus tendencias traviesas se apoderan, y se encuentra disfrutando de un encuentro caliente.La acción se enciende con una garganta profunda que sopla la mente, sus labios esbeltos navegan expertamente por los contornos de la hombría de su pareja.Los guantes permanecen, agregando una capa extra de kink al encuentro ya acalorado.La acción escala mientras se inclina, presentando su delicioso desgarro para una follada vigorosa. Su compañero, sin poder resistirse a su irresistible encanto, la toma por detrás, sus embestidas enviando oleadas de placer recorriendola.A pesar de sus esfuerzos por mantener las cosas en pompa, su supervisor pilla el viento de su traviesa escapada, lo que lleva a una rápida terminación.Pero para estos dos, la emoción de ser pillada es tan excitante como el acto mismo.